quarta-feira, janeiro 04, 2012

O Judaísmo e a Ciência – 3ª Parte

¿Quién dijo que la Tierra es

redonda?

¿tierra redonda?

Cualquier ser humano medianamente informado sabe que en la antigua Grecia dominaba la convicción de que la Tierra tenía forma plana; y que tres ballenas de tamaño cósmico le servían de apoyo al espacio. Otras civilizaciones sostenían que no era sino sobre elefantes que nuestro "planeta" descansaba. Así también, nadie dudaba de que los terremotos se debían al movimiento eventual de esos pilares y sostenes zoológicos. Intolerable por su "falta de lógica" se consideraba a la idea de una tierra esférica, un planeta "flotante" (con todo lo que ello implica).

Luego de las travesías de Colon, inmovible en su certeza de la redondez terrestre, reconocieron los hombres de ciencia que toda la sabiduría anterior, basada en la contraria teoría (anteriormente expuesta), era equivocada. Sin embargo, el común de la gente, la mayoría, continuaron viviendo bajo la sombra del error. A lo largo del tiempo la esferidad de la tierra acabo por afirmarse, y recibió en las últimas generaciones el indiscutible sello de la ciencia. (Si aun caben dudas, de más esta decir que sobran pruebas que desmienten la hipótesis de un plano planeta basado sobre animales).

Sin embargo hay que reconocer que en la antigüedad, a causa de la carencia de tecnología, conocimientos e instrumental, no había razón para no suponer que la tierra era plana (o cualquier otra ocurrencia). Mas todavía si se tiene en cuenta que la idea de un planeta redondo implicaba el engorroso inconveniente de hombres, en cierto lugar del mundo, parados cabeza abajo (Newton, por supuesto, aun no había nacido).
...Pero; en el Zohar Hakadosh, pilar de la Cabaláh, escrito hace más de 2000 años, estaba ya registrada la aseveración de la real forma del planeta tierra y la gravedad, y con lujo de detalles.
Dice en Zohar, Vaikrá daf (pagina) 10a:

"El mundo gira y, a su vez, tiene forma esférica. Sobre él, sus habitantes están de pie y cabeza abajo. Y todas las criaturas de la Tierra, que viven en distintos puntos de ella, tienen apariencias distintas: en color de piel, rasgos faciales, etc. El sol determina cambios climáticos en cada zona [estaciones], y además alumbra una parte mientras la otra permanece en la oscuridad. Hay lugares iluminados siempre y que no se encontrará en ellos noche sino en períodos de tiempos cortos [los polos]. Porque así está escrito en los Salmos (Tehilim - Salmos 139): "Te agradezco por las luminarias y son sorprendentes Tus obras". Y este secreto es transmitido por la sabiduría de la Toráh".

De este fragmento del Zohar se desprende algunas ideas considerables:


1. Una tierra esférica.
2. Habitantes en toda la extensión de su territorio.
3. La fuerza de la gravedad.
4. Diferenciación de razas de acuerdo a sus características físicas.
5. Relación entre hábitat natural y características físicas.
6. Distinción entre noche y día unitemporales.
7. Sectores en que reina la luz durante gran parte del año incesantemente, o sea, los polos terrestres.

Los Sabios de Israel no ignoraban entonces que este modo de pensar era suyo propio y que resultaría extraño a los sabios de las demás naciones; es por eso que al final del párrafo definieron estas consideraciones en calidad de secreto. Además, señalan que el origen de estos conocimientos no es resultado de investigaciones sino de una transmisión bíblica, recibida en el Monte Sinaí, por D's, el creador y arquitecto del planeta y el cosmos y todo lo existente; lo que vemos y lo que nos está oculto; lo que sabemos y lo que aun no hemos descubierto.

¿Cuántas estrellas hay en la constelación Pléyades?

En esta constelación distanciada a 300 años luz de la tierra, distinguimos, a simple vista en una noche clara y despejada, seis estrellas. Una visión muy aguda permite ver siete y tal vez ocho. Por eso consideraron los astrónomos durante muchas generaciones que las pléyades eran ocho estrellas.

Sin embargo en el año 1609 gracias al telescopio diseñado por Galileo Galilei comenzó a pensarse que el numero de estrellas de tal constelación era un tanto mayor.

En los últimos años, con la ayuda del radiotelescopio se descubrió que está compuesta de más de cien (ver "Ejercito Celestial" pag. 134, astrónomo Dr.N.Vidal y Enciclopedia Judaica, pag. 674.).

En el Talmud, Tratado de Berajot 58b dice lo siguiente:

"Cómo son las Jimhá (pléyades). Dijo Shmuel: como cien estrellas [la conforman]. Hay quienes dicen que están concentradas y muy cercanas unas de otras, pero hay quienes opinan que están dispersas".

(Consultar también la exegesis de Rashi).

El Talmud fue escrito hace aprox. 1500 años. Como es de suponer, en aquella época aun no habían telescopios, por lo menos, no oficialmente. (vean articulos anteriores a este0

Los investigadores de astronomía no judíos no aceptaban de manera totalmente las palabras del Talmud; incluso intentaban refutarlas con todos los medios posibles. Sin embargo los Sabios del Talmud se mantuvieron firmes en su posición. Esto es porque tenían la convicción de que los conocimientos que poseían provienen del Creador del universo, que incluye también a las pléyades, y quién mejor para decir qué y cuántas cosas hay en el universo, que su propio Creador...

Este conocimiento lo recibieron los Sabios de Israel de boca de sus mayores y estos de sus mayores ininterrumpidamente hasta Moshe Rabenu que lo recibió de D´s en el Monte Sinaí.