sexta-feira, março 30, 2018

Mensaje del Rabino Lic. Ruben Najmanovich para Pesaj 5778/2018


Pesaj: Paró, Auschwitz y la Libertad de Pensar

“Al hombre se le puede arrebatar todo salvo una cosa: la última de las libertades humanas -la elección de la actitud personal ante un conjunto de circunstancias- para decidir su propio camino.”  Víctor Frankl.
En Pesaj tenemos prohibido poseer jamets. El Jamets representa la arrogancia. Pesaj es tiempo de Libertad, libertad espiritual, el conocer la esencia del porque hemos salido de Egipto (Mitsraim). Esa salida se debió a la Misericordia del Creador.
En realidad, lo único que se interpone entre Ud. y D’s .......... es Usted.
Y esto se debe al Jamets, esta es la lección que aprendemos al remover el Jamets de nuestra propiedad. En definitivo cada uno precisa remover su propia arrogancia.
Libertad significa poseer la capacidad de usar nuestro libre albedrio para crecer y desenvolvernos. Muchas personas piensan que son libres, cuando en verdad son esclavas de las novedades y modismos de la Sociedad.
Víctor Frankl en su libro: El hombre en busca del sentido, llega a una conclusión sobre el concepto de libertad. Austríaco, neurólogo y psiquiatra, fundador de la logoterapia, Frankl, que perdió a sus padres y a su mujer en los campos de exterminio nazi, se asomó allí a los confines del horror y la degradación, y a la más brutal de las barbaries imaginables.
Entre 1942 y 1945 estuvo prisionero en varios de esos centros, Dachau y Auschwitz incluidos. Fue a partir de esa experiencia que desarrolló gran parte de las teorías que desgranaría no sólo en la obra mencionada más arriba, sino también en la práctica clínica, con quienes acudían a atenderse con él.
Cuenta Gordon Allport, antiguo profesor de psicología de la Universidad de Harvard y uno de los especialistas más renombrados en Estados Unidos, en el prólogo a El hombre..., que Frankl solía sorprender a sus pacientes con una pregunta: “¿Y usted por qué no se suicida?”.
Al estupor inicial seguía una necesaria revisión de todo aquello que ataba a cada uno a la vida: para uno podrían ser sus hijos; para otro, su pareja; para un tercero, una misión a llevar a cabo; para alguien más una pasión, sus estudios, su carrera, un talento por explotar o incluso, como dice el prologuista, “sólo unos cuantos recuerdos que merece la pena rescatar del olvido”.
Esclavitud es tomar una actitud no pensada, siguiendo los deseos e impulsos corporales. Nuestro trabajo en Pesaj es salir de esta esclavitud rumbo a la verdadera libertad.
Una de las libertades a ser trabajadas durante Pesaj es la “Libertad de la Boca” (o sea del habla). Nuestros Sabios se refieren a la boca como una de las partes más peligrosas del cuerpo. Es el único órgano que puede causar problemas en ambas direcciones – en lo que entra (comida y bebida) y en lo que sale (en la conversación). Es tan peligrosa, que es el único órgano humano que tiene dos “trabas”: los dientes y los labios.
Algunas personas son esclavos de sus bocas, tanto en lo que comen como en lo que hablan. En la noche del Seder corregimos estos problemas. Tenemos la mitsváh de relatar la salida del Pueblo Judío de Egipto (para perfeccionar nuestras conversaciones) y la mitsváh de comer Matsá y beber 4 vasos de vino (para ennoblecer lo que comemos y bebemos).
La estructura de la lengua hebrea, por sí sola, señaliza la dirección de la “Libertad de Boca”. La palabra Pesaj puede ser dividida en dos partes: Pe y Saj que significa “boca hablando”.
Deseo resaltar que, a lo largo de la historia del Pueblo Judío, siempre se levanto un dictador, un tirano, que su objetivo era destruir, aniquilar, exterminar, hacer desaparecer al Pueblo Judío de la faz de la tierra, que no sea mas que un punto en la historia de la humanidad. ¿Por qué? Mas allá de la judeofobia existente, hay una razón que esta por detrás de la visible, recién mencionada, es que la libertad de pensar, de crear, de manifestar, exteriorizada por nuestra boca, pero elaborada en nuestra mente, la cual se interrelaciona con la fuente de lo sentimientos, el corazón.
Toda esta ecuación produce una sensación de frustración y de mediocridad en los tiranos, entonces la solución para estos dictadores es destruir la fuente que les produce esos sentimientos encontrados.
La Hagadá nos retrotrae esa fuente de libertad que esta instalada en el ADN del Pueblo Judío.
Nosotros tenemos la obligación de contar el Éxodo de Egipto durante toda la noche. La palabra hebrea PAROH (Quien era el que perseguía, esclavizaba, y deseaba aniquilar el futuro de los Judíos en la historia de Pesaj) puede ser dividida en dos partes: Pe y Ráh, una “mala boca”. Nuestra aflicción durante la esclavitud en Egipto era caracterizada como PERAJ (trabajo duro), que puede ser leído en 2 palabras: Pé y Raj, una “boca suelta”, sin responsabilidad con lo que se habla.
Que podamos, en este Pesaj, libertarnos de la “mala Boca” y liberarnos de la “boca suelta”, donde mucha comida y bebida errada entran y muchas palabras inapropiadas se deslizan desde nuestro interior hacia fuera.
Víctor Frankl solía decir que “quien tiene algo por qué vivir, es capaz de soportar cualquier cómo”.
Pesaj nos enseña que el Pueblo Judío, siempre tuvo objetivos y metas a cumplir, por eso era capaz de soportar las sombrías noches del destierro a lo largo de dos mil años.
Meditemos profundamente y en Pesaj encontraremos la Libertad tan ansiada. Mostraremos al mundo que somos “hombres al encuentro del sentido.

JAG HAPESAJ KASHER VESAMEAJ!!!!!!

Rabino Lic. Ruben Najmanovich


Reflexiones y Pensamientos: "La Psicología de Pesaj 5778"


terça-feira, março 27, 2018

Pêssach 5778: 3ª Entrega de Leis Fundamentais


Kitniot (leguminosas)

O chamêts que a Toráh proibiu é aquele proveniente das cinco espécies de cereais (trigo, cevada, aveia, centeio e espelta), mas no Talmud é trazida a opinião de Rabi Yochanan, que determina que o arroz deve ser considerado como mais uma variação das cinco espécies e que também a sua fermentação a Torá proibiu. No entanto, os demais sábios discordam dele e permitem comê-lo em Pêssach. Há cerca de 700 anos, as comunidades ashkenazim começaram a adotar maior rigor e não mais comer kitniot (leguminosas) em Pêssach.
Os principais motivos para esse costume foram: 1. Pelo fato de se fazer farinha de algumas dessas espécies; isso gerou o receio de que as pessoas viessem a assar também massas de farinha das cinco espécies em Pêssach, sem o cuidado com a fermentação. 2. Ou pela similaridade entre os cereais e as leguminosas, já que ambos são granulados e armazenados por longos períodos, causando o receio de que sejam misturados entre si. Assim, o costume dos ashkenazim até hoje é proibir o consumo de kitniot na festa de Pêssach.
Embora o costume dos sefaradim seja comer kitniot na festa de Pêssach, eles devem tomar o cuidado de verificá-los muito bem antes do consumo para certificar que não se misturaram com os cinco cereais. Hoje em dia, porém, muitos sefaradim (principalmente os marroquinos) são rigorosos e não comem arroz em Pêssach, por causa de um episódio em que foram encontrados resíduos de trigo no arroz. Portanto, os que são lenientes e costumam comê-lo devem verificá-lo três vezes antes de consumi-lo. Em todo e qualquer caso de dúvida haláchica sobre como proceder, deve-se consultar um Rav possek (rabino legislador) especialista nessas halachot. 
Nos casos de casais em que um dos cônjuges descende de uma família que não costuma comer kitniot e o segundo costuma comê-los, a esposa deve seguir os costumes do seu marido. No caso de uma ashkenazia casada com um sefaradi, a partir do casamento consumado, a esposa pode passar a comer kitniot em Pêssach e, de acordo com algumas opiniões rabínicas, deve fazer hatarat nedarim (anulação de votos, juras, promessas e obrigações em geral), pelo fato de estar modificando um de seus costumes ancestrais estabelecidos.
A seguir, listaremos algumas variedades de kitniot (leguminosas): arroz, ervilha, houmus, mostarda, lentilha, feijão, milho, gergelim, flocos de milho (corn flakes). Com relação ao amendoim, há divergências rabínicas, e quem não tem neste caso um costume definido pode ser leniente. É costume ser rigoroso com relação ao óleo de soja, em termos da proibição de kitniot.
Amêndoas, nozes, pistache não são kitniot. Da mesma forma, fécula de batata não se inclui na proibição de kitniot e é permitido consumi-la, até mesmo para os ashkenazim. O costume difundido é ser leniente com relação ao óleo de algodão, que também não se inclui na proibição de kitniot. 
Quem costuma seguir a proibição de consumo de kitniot pode comer e cozinhar em utensílios de quem não segue esta proibição, com a condição de que tenham passado 24 horas desde a última utilização deste utensílio para cozinhar kitniot. Bediavad (post factum), se um alimento foi cozido neste utensílio (usado para kitniot) antes das 24 horas citadas, este alimento é kasher. Quando há necessidade, para crianças ou doentes, mesmo que não corram qualquer risco, é possível ser leniente e dar-lhes de comer kitniot. Entretanto, deve-se separar utensílios especiais para esta função e, certamente, examinar e verificar bastante as espécies de kitniot, antes de lhes dar para comer.

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Utensílios de Pêssach

O mais aconselhável é utilizar utensílios exclusivos para Pêssach ou novos, durante toda a festa de Pêssach. Isto porque as leis de kashrut de Pêssach são complexas e cheias de pequenos detalhes.
O princípio básico determinante é que, embora sejam rígidas e vedadas, as paredes dos utensílios absorvem parte do sabor do alimento cozido nas mesmas e, desta forma, um utensílio no qual se cozinhou chamêts ("utensílio de chamêts") possui sabor de chamêts absorvido em seu material e é terminantemente proibido utilizá-lo em Pêssach. Se, por engano, em Pêssach, se cozinhou em um utensílio de chamêts – caso tenham passado 24 horas desde o último cozimento do chamêts –, de acordo com o costume dos sefaradim, é possível ser leniente e consumir o alimento. Para os ashkenazim, no entanto, o alimento é proibido ao consumo.
A principal regra nas Halachot de "kasherização" dos utensílios em Pêssach é o conceito "conforme o absorve, assim o expele", isto é, da maneira por meio da qual o sabor dos alimentos é absorvido por um utensílio, assim também pode ser expelido pelo mesmo. No caso de um sabor que tenha sido absorvido por meio de água fervente, como uma panela na qual se tenha cozinhado uma sopa que contém chamêts, deve-se imergir o utensílio em água fervente – em ebulição; desta forma, o sabor do chamêts é expelido do mesmo.
Esse método de kasherização chama-se "hagalá". Entretanto, no caso de um utensílio que tenha absorvido o sabor do alimento por meio do calor do fogo, sem líquidos, por exemplo, uma forma na qual se assou um bolo, para que se consiga expelir o sabor de chamêts, é necessário aplicar fogo sobre o mesmo - com um maçarico, por exemplo, até que saiam dele faíscas. Esse método é chamado de "libun".
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"Kasherização" dos utensílios para Pêssach


É importante enfatizar que, antes da "hagalá" (esterilização com água fervente) dos utensílios, deve-se evitar o uso dos mesmos por 24 horas. Da mesma forma, deve-se limpar muito bem o utensílio que vai passar pela hagalá de todo e qualquer resíduo de alimentos aderentes ao mesmo. Entretanto, antes do "libun" (esterilização incandescente – com fogo de maçarico), não é necessário limpar tão bem os utensílios, já que o fogo queimará quaisquer resquícios de alimento grudados em suas paredes. As alças e cabos dos utensílios também devem ser "kasherizadas", e quando são presas aos mesmos por meio de parafusos, deve-se desmontá-las antes da hagalá, para limpeza. Muitos costumam ser rigorosos, lavando os utensílios em água fria após a sua hagalá.
No caso da frigideira, já que o seu uso comum é fritar com um pouco de óleo, a kasherização deve ser por meio de libun. No caso de uma frigideira de teflon, no entanto, na qual é possível fritar sem óleo, não se pode kasherizá-la para Pêssach, já que ela seria danificada pelo libun. Da mesma forma, é proibido kasherizar para Pêssach formas de bolo caseiras, que podem ser danificadas por causa do libun. Deve-se comprar formas novas.
Quanto aos utensílios de vidro, o costume dos sefaradim é lavá-los bastante e usá-los sem qualquer kasherização especial para Pêssach. Pelo rito ashkenazi, costuma-se não kasherizá-los para Pêssach, e, num momento de extrema necessidade, é permitido ser leniente e kasherizá-los por meio de hagalá (em água fervente), por três vezes. Utensílios simples de plástico flexível não devem ser kasherizados para Pêssach, e, se forem feitos de plástico rígido, devem ser kasherizados por hagalá. É proibido kasherizar para Pêssach utensílios de cerâmica e porcelana. O copo de Kidush deve ser kasherizado também por meio de hagalá.

Pêssach Kasher Vessamêach

Pêssach 5778: 2ª entrega de Leis fundamentais



O famoso: Produto "Kasher LePêssach"

O RaMá (Rabino Moshe Isserlis, Cracóvia, 1520 - 1572), cujas decisões rabínicas são seguidas pelos ashkenazim, escreveu que o costume para os mesmos é ser rigorosos em Pêssach, a princípio, e não comer produtos que não tenham sido supervisionados especialmente em sua fabricação antes de Pêssach. A causa é o receio causado pelo fato do chamêts estar bastante presente entre nós, e não ser comum tomar cuidado com o mesmo durante o ano todo. Há também o receio de que se tenha utilizado, na fabricação dos alimentos, utensílios que contenham "gosto" de chamêts absorvido em suas paredes.
O Shulchan Aruch (Autor o Rabino Yosef Caro, Tsfat, 1488 - 1575), cujas decisões rabínicas são seguidas pelos sefaradim, escreveu que se deve ser leniente, pois enquanto não se tem suspeitas fortes e embasadas de que o chamêts tenha se misturado aos alimentos, não se deve recear. A maioria dos selos de kashrut de qualidade, em todo o mundo, costuma ser rigorosa como o RaMá e certificam os produtos com "Kasher Lepêssach" somente quando são tomados cuidados especiais na preparação dos alimentos para Pêssach.
E assim á a lei para o leite, para a carne bovina e para as aves, que são preparados e vendidos para Pêssach, ou seja, também estes produtos devem possuir carimbos de kashrut especiais para Pêssach, atestando que foram supervisionados para evitar contato dos mesmos com chamêts, desde a ordenha e o abate até a embalagem.
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Remédios em Pêssach


Na composição de alguns remédios há amido de trigo. Sua função é endurecer e solidificar o remédio. Todos os poskim (rabinos legisladores) concordam que, quando se trata de um doente em estado grave, e o médico receitou que este tome um remédio que é ou contém chamêtz, é mitzvá obedecer às ordens médicas, já que a proibição de que se corra risco de vida se sobrepõe à proibição de comer chamêtz em Pêssach. A dúvida emerge quando se trata de um doente sem gravidade.
Se o remédio para este doente possui sabor agradável, é obrigatório verificar e examinar a kashrut deste para Pêssach e, se não for kasher, é proibido tomá-lo.
No caso do gosto do remédio ser amargo, já que o amido de trigo está misturado a outras substâncias que danificaram o seu sabor, é permitido tomar este remédio em Pêssach. Há, no entanto, poskim que alegam que, como o doente citado está interessado no remédio, este é importante para ele e não se considera que o medicamento tenha sido corrompido em termos do consumo, sendo assim proibido tomá-lo em Pêssach. Portanto, no caso de necessidade, deve-se consultar um rabino especialista nas halachot sobre como proceder.
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Produtos de Higiene em Pêssach

Em determinados produtos, como sabonetes, shampoos e cremes diversos, o álcool de trigo – ou demais substâncias, cuja origem é chamêts – é acrescido à composição. Este é um assunto complexo na Halachá (Lei Judaica) que gera divergências entre os poskim (rabinos legisladores), ou seja, se a unção do corpo com tais sabonetes, pastas ou similares seria equivalente a bebê-los ou não. A seguir, um resumo das Halachot na prática, no tocante a este assunto:
1. Com relação a pastas de dente, é obrigatório ser rigoroso quanto à kashrut especial para Pêssach das mesmas, pois elas têm sabor agradável.
2. É permitido ser leniente com relação aos cremes e sabonetes para lavagem corporal ou perfumes, que em geral contêm álcool, não exigindo kashrut especial para Pêssach, porque são impróprios para consumo como alimento, embora haja muitos que costumam ser rigorosos e só comprar sabonetes e cremes “Kasher LePêssach”.
3. Produtos de limpeza doméstica, para a casa ou para as roupas (graxa para sapatos, por exemplo), não precisam de qualquer supervisão, pois seus gostos são desagradáveis e são totalmente impróprios como alimento.
4. Batons, a princípio, precisam ter kashrut para Pêssach.
5. Maquiagem e demaquilantes não precisam de kashrut para Pêssach, mas deve-se cuidar para que não sejam aplicados sobre os lábios.

segunda-feira, março 19, 2018

El Seder de Pesaj



La Noche del Seder de Pesaj: Bendición a los niños


Cita el “Pirke de Rabí Eliezer”, que esta noche del Seder de Pesaj, fue cuando nuestro patriarca Itzjak llamó a su hijo Esav y le dijo que esa noche lo ángeles celestiales cantaba loas al Eterno, esta noche se abren en el cielo ventanas especiales de rocío de bendición. Por ello, le encomendó que el preparase una comida y así lo bendeciría. Fue esa misma noche en que bendijo a nuestro patriarca Yaacob con diez bendiciones y salió de la presencia de su padre vestido de gala y sumamente alegre y al salir cayó sobre él un rocío de bendición que lo dotó con una fuerza especial.

Según esto, escribe nuestro maestro Rabí Itzjak Yosef Shlita (Yalkut Yosef Pesaj tomo 3 folio 62) que esta noche es especial para bendecir a nuestros hijos ya que se abren ventanas especiales de bendición. Esto sumado a la costumbre de bendecir a nuestros hijos la noche de Shabat tras el kidush.

Y así vimos que nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef ZT”L bendecía la noche del Seder de Pesaj a su hijos, hijas, nietos y nietas con especial alegría y santidad.

Agregó Rabí Itzjak Yosef, Shlita en nombre de libro “Bet Aharon” que esta noche es particularmente propicia para pedirle a D-os y que nos conceda nuestros ruegos. Y en nombre del libro “Netibot Shalom” agrega que esta noche es propicia para cambiar el mal designio y obtener la bendición divina liberándonos de las cadenas de nuestros sufrimientos.

Escribe el Jida, en nombre del Ari ZT”L que los milagros que experimentan los hijos de Israel se materializan por medio de una gran iluminación divina, la cual trasciende el tiempo y hace que ese momento que signado como uno de bendición y éxito para la posteridad.

Según esto, explico el Rab Volve ZT”L el párrafo que leemos en la hagadá de esta noche : En un comienzo nuestros padres eran esclavos en Egipto y ahora nos acercó el Eterno a Su servicio. Cabe preguntar ¿Acaso “ahora” nos acercó a Su servicio o fue hace ya miles de años?

Pero nos enseñan nuestros sabios que ahora, en la noche del Seder, una noche de una iluminación especial el Eterno nos acerca a El, no sólo recordamos la epopeya de Egipto sino recibimos nuevamente esa carga espiritual que vivieron nuestros padres al ser liberados.