segunda-feira, março 19, 2018

El Seder de Pesaj



La Noche del Seder de Pesaj: Bendición a los niños


Cita el “Pirke de Rabí Eliezer”, que esta noche del Seder de Pesaj, fue cuando nuestro patriarca Itzjak llamó a su hijo Esav y le dijo que esa noche lo ángeles celestiales cantaba loas al Eterno, esta noche se abren en el cielo ventanas especiales de rocío de bendición. Por ello, le encomendó que el preparase una comida y así lo bendeciría. Fue esa misma noche en que bendijo a nuestro patriarca Yaacob con diez bendiciones y salió de la presencia de su padre vestido de gala y sumamente alegre y al salir cayó sobre él un rocío de bendición que lo dotó con una fuerza especial.

Según esto, escribe nuestro maestro Rabí Itzjak Yosef Shlita (Yalkut Yosef Pesaj tomo 3 folio 62) que esta noche es especial para bendecir a nuestros hijos ya que se abren ventanas especiales de bendición. Esto sumado a la costumbre de bendecir a nuestros hijos la noche de Shabat tras el kidush.

Y así vimos que nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef ZT”L bendecía la noche del Seder de Pesaj a su hijos, hijas, nietos y nietas con especial alegría y santidad.

Agregó Rabí Itzjak Yosef, Shlita en nombre de libro “Bet Aharon” que esta noche es particularmente propicia para pedirle a D-os y que nos conceda nuestros ruegos. Y en nombre del libro “Netibot Shalom” agrega que esta noche es propicia para cambiar el mal designio y obtener la bendición divina liberándonos de las cadenas de nuestros sufrimientos.

Escribe el Jida, en nombre del Ari ZT”L que los milagros que experimentan los hijos de Israel se materializan por medio de una gran iluminación divina, la cual trasciende el tiempo y hace que ese momento que signado como uno de bendición y éxito para la posteridad.

Según esto, explico el Rab Volve ZT”L el párrafo que leemos en la hagadá de esta noche : En un comienzo nuestros padres eran esclavos en Egipto y ahora nos acercó el Eterno a Su servicio. Cabe preguntar ¿Acaso “ahora” nos acercó a Su servicio o fue hace ya miles de años?

Pero nos enseñan nuestros sabios que ahora, en la noche del Seder, una noche de una iluminación especial el Eterno nos acerca a El, no sólo recordamos la epopeya de Egipto sino recibimos nuevamente esa carga espiritual que vivieron nuestros padres al ser liberados.