quinta-feira, setembro 17, 2015

Siempre hay algo para reparar

 

Shabat Shuva1

En las vísperas de Yom Kipur y ya cercano al Shabat Shuváh comparto con Uds. está aleccionadora historia, que nos va ayudar la Teshuváh – arrepentimiento y retorno que tanto necesitamos.

El Rabino Baal Shem Tov, estaba enseñando a sus discípulos, cuando de pronto fueron interrumpidos por un golpe en la persiana. Un aldeano que arrastraba un carro lleno de herramientas se paró del otro lado de la ventana y preguntó: ¿Necesitan arreglar algo?¿alguna mesa que se tambalee, alguna silla rota?¿quizás falta un ladrillo en la chimenea?

No, no fue la impaciente respuesta de sus alumnos, que deseaban continuar la clase. Todo está en perfectas condiciones. No necesitamos arreglar nada.

¿De veras?¿Nada para arreglar? Dijo el campesino. Es imposible que sea así Fíjense bien y seguramente encontrarán algo que requiera de una corrección o ajuste.

En ese instante el rabino dijo a sus discípulos: “Muchas veces les enseñé que nada sucede por casualidad. Cada evento tiene un propósito y de cada cosa que vemos o escuchamos nos debe quedar una enseñanza.

Reflexionemos acerca de las palabras que acabamos de escuchar de un simple aldeano. Que profundas y relevantes son para cada uno de nosotros ¿Está todo realmente en perfectas condiciones? A veces parece ser así pero si uno realmente busca en su corazón y evalúa su vida, encontrará seguramente algo para reparar....”

Muchas veces decimos : "está todo bien" pero dentro nuestro sabemos que hay una cantidad de espacios que requieren de nuestra atención.Pero pareciera que si no los reconocemos es como si no existieran . Nos quedamos esperando como si se pudieran solucionar solos . Lo único que necesitan es nuestra atención y la declaración de que no queremos seguir así.